Llorar frente al mar
de dicha
y de desdicha.
Todo es agua,
la ola y el ojo
el ojo y la ola.
Todo es sal.
La separatividad
es imposible
cuando las lágrimas
caen y lamen
la playa
de cada mejilla.
Comunión
de acuosos vaivenes
y este holograma
de mar y arena
que somos
cuando, invadidos
de emoción,
nos abrimos
mar a mar
al despertar del alma.
y de desdicha.
Todo es agua,
la ola y el ojo
el ojo y la ola.
Todo es sal.
La separatividad
es imposible
cuando las lágrimas
caen y lamen
la playa
de cada mejilla.
Comunión
de acuosos vaivenes
y este holograma
de mar y arena
que somos
cuando, invadidos
de emoción,
nos abrimos
mar a mar
al despertar del alma.
Alina Diaconú (Rumania - Argentina).
Publicado en Revista Ñ.28 (2006)