XL
Esa imagen inmóvil mientras mueves
hilo y aguja tan acompasada-mente
se compone y ordena sobre el rayo
que la tarde te envía.
El sol es un carrete dándote hilos.
En su espuma dorada te reclinas
y piensas
un tranquilo pensar mientras descansas.
La tarde mientras tanto cae y apaga
su débil fuego,y tu imagen se queda para siempre,
-con la espuma dorada que te envuelve,-
inmóvil, mientras
hilo y aguja cosen sueño y sueño
para la bandera
del grato amor sereno que han fundado
hilo y aguja y sol y tú, esta tarde.
Publicado en Cien poemas de amor (Editorial Universidad Estatal a distancia)
1 comentario:
Solo una imagen queda fija... la de la persona en la que nos inspiramos...
bonita entrada :)
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