(Ciudad - Dardo Aguiar)
el ómnibus nos regresa a los dormitorios
en el ojo de su ruido
apegados de acuoso cansancio
ya soñamos el próximo sueño
trozos enormes de pasajeros
quiebran las tinieblas que suscitó la modorra
compiten por el aire insuficiente
ruegan al chofer y al tiempo
que aceleren el descenso
hacia nosotros mismos
pero el tedio se parte como el mar rojo
solo el ruido del motor
empuja su itinerario
porque una niña acaba de subir al ómnibus
una niña con su túnica y su moña
y un bebé de pocos meses en los brazos
Javier Etchevarren (Uruguay)
Publicado en el libro Desidia ( Editorial Vil).
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