(Ray Milland-Marjorie Reynolds en Ministry of fear)
ella no sabe nada.
De mi pasado sí.
De la droga que le di a mi mujer
en enfermedad terminal
para que muriera
-lo llamaron crimen por piedad-
le conté una noche de bombardeos
en el subte de Londres.
El amor confiesa.
De lo que me inquiere Scotland Yard
al lado de mi cama, no:
no maté al investigador privado
ni al espiritista ni al ciego
no puse las bombas.
Quiénes fueron
tampoco lo sé
aunque sospecho.
No más preguntas
detective:
de lo que se deba buscar
yo me hago cargo
pero ella no es partícipe
y aunque lo fuera
la intimidad se sella.
El amor no delata.
3 comentarios:
gosto do teu estilo literário, apesar das metáforas... é tão explicito as verdades...
Es así, querido escaramujo. El amor no delata, pero deja huellas...
Es así, querido escaramujo... El amor no delata, pero deja huellas.
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